Cáncer de riñón

Introducción

El equipo de especialistas de iTAcC plantea siempre que es posible la realización de cirugías mínimamente invasivas en base a técnicas de cirugía laparoscópica

Los riñones son dos órganos situados simétricamente en la parte posterior del abdomen, su misión es múltiple ya que filtra la sangre eliminando las impurezas, ayuda a controlar la tensión arterial y regula la producción de glóbulos rojos de la sangre. La causa del cáncer renal es desconocida, sin embargo, es cierto que los tumores se originan como consecuencia de la alteración en el ADN de las células de riñón lo que conduce a una proliferación incontrolada de las mismas.

A partir de la sexta década de la vida existe mayor riesgo de padecer un cáncer renal, siendo más frecuente en los varones. Se ha encontrado alguna relación con el consumo de tabaco, exposición a asbesto o cadmio y la obesidad.

Diagnóstico

El diagnóstico de cáncer de riñón es a menudo un hallazgo casual anterior a la aparición de síntomas.

Los medios diagnósticos para determinar la posible presencia de un cáncer de riñón y su extensión, son:

  • Ecografía abdominal: es una técnica no invasiva que se utiliza como primer escalón ante la sospecha de una lesión renal.
  • TAC (Tomografía Axial Computerizada): es útil para conocer lesiones tumorales y su extensión y para guiar las punciones con las que se pueden tomar las biopsias.
  • RM (Resonancia magnética): es otra técnica que proporciona mucha información al especialista sobre las características y extensión de los tumores renales.
  • PET-TAC (Tomografía por Emisión de Positrones): es más útil para conocer la existencia de metástasis a distancia ya que utiliza un radiofármaco que se elimina por vía renal y puede dar lugar a interpretaciones erróneas.
  • Punción con aguja de biopsia: es una técnica mínimamente invasiva para la extracción de una muestra de tejido que, en casos seleccionados, es capaz de confirmar a través de un examen anatomopatológico (bajo el microscopio) la presencia o ausencia de un carcinoma de riñón antes de someter al paciente a una intervención quirúrgica. Está técnica solo se utiliza en casos seleccionados ya que muchas veces es preferible valorar al paciente quirúrgicamente.

Tratamiento

Elegir la mejor opción de tratamiento depende, en primer lugar, del tipo de tumor, su localización, la extensión de la enfermedad, las condiciones clínicas del paciente y los deseos del mismo.

El abordaje del tratamiento debe definirse en un comité multidisciplinario que valore individualmente cada caso. En iTAcC este comité esta formado por un urólogo, un oncólogo radioterapeuta, un oncólogo médico, un nefrólogo, un radiólogo, un anatomopatólogo y cuando es preciso participan en la decisión otros especialistas como un cirujano del aparato digestivo, un cirujano vascular y un especialista en medicina nuclear, además es un comité abierto a la opinión de los profesionales de confianza del paciente. La finalidad de este grupo de profesionales es ofrecer a cada enfermo, de manera personalizada, el tratamiento con mayores opciones curativas y con mejores resultados funcionales.

Las bases del tratamiento de los tumores renales son: la cirugía y el tratamiento farmacológico.

Cirugía

La cirugía es el tratamiento de elección para el cáncer de riñón. Los urólogos del grupo de iTAcC son expertos en todas las formas de cirugía de cáncer renal, con especial referencia a la cirugía escasamente invasiva mediante laparoscopia.

Las opciones quirúrgicas en el cáncer de riñón incluyen:

  • Nefrectomía parcial: Cuando el diagnóstico se realiza en una fase inicial de la enfermedad y el tumor está muy localizado se plantea una cirugía conservadora del órgano para mantener la función del mismo.
  • Nefrectomía radical: Si el tumor está en una fase más avanzada pero dentro del riñón puede ser necesario realizar una extirpación completa del riñón y glándula suprarrenal junto a los ganglios linfáticos próximos.
  • El equipo de especialistas de iTAcC plantea siempre que es posible la realización de cirugías mínimamente invasivas en base a técnicas de cirugía laparoscópica.

Tratamiento médico

En los últimos años se han desarrollado fármacos biológicamente capaces de inhibir los receptores moleculares responsables de la proliferación neoplásica, Este avance terapéutico ha mejorando significativamente el pronóstico de esta enfermedad. Estos fármacos tienen la capacidad de actuar sobre las células tumorales de forma selectiva preservando al mismo tiempo las sanas, reduciendo de ese modo la toxicidad para el paciente. Además, muchos de ellos tienen la ventaja de ser administrada por vía oral.

Tratamiento de la metástasis de riñón:

Cuando la enfermedad se ha diseminado a otros órganos el paciente tiene que ser valorado en el marco de un comité multidisciplinar para iniciar un tratamiento específico en cada caso de manera individualizada utilizando diferentes opciones como tratamientos farmacológicos, radiocirugía ablativa (LINK a SBRT), o fármacos biológicos dirigidos a bloquear el crecimiento tumoral.

Seguimiento

Después del tratamiento, el equipo multidisciplinario establece un plan de control personalizado de acuerdo a las necesidades de cada paciente y la biología de la enfermedad, para descartar o detectar precozmente una posible recidiva.

El seguimiento, como toda actividad oncológica en iTAcC, se hace de manera personalizada y con la cooperación, al ser una institución abierta, de los médicos que han intervenido en el diagnóstico y tratamiento de cada caso.