Alcanzados los primeros 200 tratamientos de cáncer de mama precoz con técnicas de radioterapia ultrahipofraccionada.

terapia cancer de mama

Este nuevo protocolo de radioterapia ultrahipofraccionada, se ha incluido dentro de los procedimientos terapéuticos del centro y permite tratar a este grupo de pacientes con cáncer de mama en estadio precoces en 5 sesiones en lugar de en 25. 

La precisión de los equipos de tratamiento (Truebeam-STx) y la posibilidad de hoy, disminuye el riesgo de irradiar otros órganos que no sean la mama.

El seguimiento exhaustivo de las pacientes tratadas en este protocolo, ha permitido, a los oncólogos radioterápicos del centro confirmar la  calidad y eficacia de la utilización de técnicas de ultrahipofraccionamiento con resultados superponibles en cuanto a efectos secundarios, control local y supervivencia libre de enfermedad a los de otros tratamientos clásicos.

 

El cáncer de mama es el tipo de cáncer más común entre las mujeres. De hecho, más de 2 millones trescientas mil mujeres en todo el mundo fueron diagnosticadas en 2020 de esta enfermedad. 

Los tratamientos con radioterapia de cáncer de mama se dividen en sesiones y habitualmente se administran en 15 ó 25 sesiones, pero en los primeros meses de 2020, la publicación del estudio multicéntrico “FastForward” dirigido por Havilland y Murray, permitieron conocer la eficacia de los tratamientos ultrahipofraccionados en el cáncer de mama. 

En nuestro centro, iTAcC se comenzó a utilizar esta técnica en abril de 2020 y en la actualidad se han tratado más de 200 pacientes en sólo cinco sesiones lo que supone una ventaja en cuanto a calidad de vida de las pacientes.

Los buenos resultados y la baja toxicidad en el tratamiento de este grupo de enfermas, , se han conseguido gracias a la precisión de la máquina de tratamiento, al análisis pormenorizado de cada caso por parte del equipo de profesionales y a que somos el único centro de España que lleva a cabo estos tratamientos con control espirométrico de cada paciente, es decir, se analiza el ciclo respiratorio de cada enferma y la irradiación de la mama se efectúa en ciclos de apnea que controla la propia paciente.

El análisis e investigación sobre los datos obtenidos en estas primeras 200 pacientes ha permitido concluir a los oncólogos radioterápicos del Instituto de Técnicas Avanzadas contra el Cáncer (ITACcC), que la dosis de radiación sobre otros órganos como el corazón o el pulmón baja hasta el 1 %.

radioterapia ultrahipofraccionada

Según Marta Rodríguez, oncóloga del Hospital Beata María Ana y una de las responsables de la puesta en marcha de este protocolo nos dice: “hay dos ventajas fundamentales a la hora de realizar el ultrahipofraccionamiento con análisis espirométricos en el cáncer de mama: en primer lugar, mejora la dosimetría y la planificación del tratamiento, ya que este es controlado por la propia paciente. Y, en segundo lugar, este solo es efectivo si la paciente se encuentra en estado de apnea y en posición estática, reduciendo notablemente el riesgo de irradiar otros órganos que no sean la mama.”

Además, Marta Rodríguez afirma que otro de los beneficios de este innovador tratamiento es que “pese a aumentar la dosis por fracción de tratamiento y reducir el número de sesiones considerablemente, el grado de toxicidad no aumenta”

 

Los análisis espirométricos en el ultrahipofraccionamiento del cáncer de mama

Los especialistas en oncología radioterápica del Hospital Beata María Ana han comprobado que muchas de las pacientes que acuden a sesiones de radioterapia ultrahipofraccionada, para combatir el cáncer de mama precoz se sienten mucho más seguras y tranquilas que con un tratamiento convencional.

Esto se debe, a que son ellas mismas quienes controlan el tratamiento a través de su respiración. Para ello, antes de empezar la sesión deben tumbarse en una mesa de tratamiento y mantenerse boca arriba, en una posición relajada apoyada en todo momento por el equipo técnico de manera individualizada. 

Una vez hecho esto, se les coloca una boquilla por la que respiran y unas gafas de realidad virtual en las que ven gráficamente su propia respiración. La función de estas gafas es mostrar a las pacientes cómo es el flujo de su respiración, dibujándoles a través de unas líneas de colores que suben, bajan o se mantienen estáticas sus movimientos de inspiración, expiración y apnea y controlar ellas mismas el momento de la irradiación.

Esto hace que se sientan más tranquilas y relajadas a la hora de acudir a terapia, pues son conscientes de que solo se les está irradiando mientras están en apnea. Y, además, reduciendo el riesgo de dañar otros órganos próximos como los pulmones o el corazón.

Una vez terminadas las 5 sesiones, las pacientes acuden a revisiones periódicas para que los doctores puedan evaluar cómo ha afectado este tratamiento a su organismo. “Por ahora, hemos tratado a más de 200 pacientes y el grado de éxito es del 100%”, asegura la doctora Marta Rodríguez.

En el acto celebrado en la Real Academia Nacional de Medicina de España con motivo del día mundial contra el cáncer de mama de 2023, el Doctor Rodrigo García-Alejo, Director médico y responsable de Radio-Oncología en el Instituto de Técnicas Avanzadas contra el Cáncer, habló sobre el presente y el futuro del tratamiento radioterápico del cáncer de mama. Se puede ver su intervención en el siguiente vídeo, entre el tiempo 1h 25 minutos hasta 1h 56 minutos.